Me comentaron que puedes ser cualquiera de las dos... sin embargo, ser la excepción es algo mucho más grande y hermoso. Una persona al hacerte parte de su vida te puede elegir y tomarte como la excepción o la regla, pero ninguna de las dos juntas...
Ser la excepción para alguien significaría que no importaría lo que tuviese que hacer para estar contigo y disfrutar de tu compañía durante el día, no habría cosa más importante que poder tenerte entre sus brazos, sería indispensable poder rozar sus labios con los tuyos siquiera un minuto, vitalmente necesitaría hablarte, escucharte o tan solo verte, sería sumamente imposible que no saliera de su boca un "te amo", a tan solo pasos de ti ya empezaría a extrañarte, no tendría sueños en los que no estés a su lado, podría cambiar el mundo si se lo pidieses, su vida sería la tuya,compartirían un montón de aventuras sin un segundo de aburrimiento o cansancio, nada podría ser mejor si no estuvieses junto a él, te haría infinitamente feliz sin dudarlo siquiera una milésima de segundo y todo esto y mucho más sin esperar nada a cambio, tan sólo confiando en que comparten el mismo sentimiento de amarse mutuamente sin limites...
Y por otro lado, ser la regla para alguien significaría que serías una más de sus obligaciones o deberes los cuales debe cumplir pero, en realidad, desearía no hacerlo, no importarían tus sentimientos sino tan solo los suyos, sin duda alguna, nada de lo que ser la excepción implica importaría, el hecho de estar contigo sería superfluo, daría igual si te viese o no, quizá en sus sueños ni existirías, el besarte o abrazarte no lo valoraría como nada especial es más, tal vez sería indistinto... En fin, serías una de esas pequeñísimas cosas sin importancia que figuran en la vida de otra persona y aunque no se diera cuenta, estarías gritando a 4 voces que realmente para ti es increíblemente importante... Si, es triste al extremo pero muchas veces cierto...
Ahora, la pregunta es: ¿cómo ser la excepción y no la regla? Bien, creo eso depende de ambos, de la pareja en conjunto, de sus empeños... Pero, nada en el amor es definitivo y permanente... Como leí "nada es para siempre, ni siquiera la muerte"... ¿Será cierto? De todas formas, pienso que uno no se enamora deseando ser la excepción y evitando ser la regla, simplemente pasa y sucede sin que lo queramos... Así también, la seguridad y confianza unos de los cimientos en la construcción de uno edificio que simboliza al amor son un largo camino repleto de obstáculos y atajos que decides si tomarlos o no... Muchas cosas son necesarias: ojalá fueran fáciles de conseguir, aunque paradojicamente lo fácil aburre... Sin cuestionamientos, el amor es una encrucijada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario